Familiares pidieron a las autoridades investigar a la propietaria del muro que cayó sobre la humilde vivienda ubicada en la segunda etapa del barrio Hialeah en Managua y que acabó con la vida de tres menores de edad y su padre el pasado viernes en horas de la tarde.
En declaraciones a la oficialista Radio Ya, Margina García, tía de los niños y cuñada de Mauricio Arróliga, pidió una investigación sobre lo ocurrido, ya que en varias ocasiones la familia había pedido a la propietaria del muro perimetral que revisara la estructura.
"Ellos no querían vivir en ese cuarto porque ya habían visto que el muro estaba en mal estado, y aunque ya le habían dicho a la dueña que lo reparara, ella siempre hacía caso omiso", expresó en medio del dolor la hermana de la única sobreviviente.
García, explicó que su hermana Eveling Carolina García de 42 años logró sobrevivir a la tragedia porque se encontraba preparando la cena en otro cuarto y no donde sucedió la tragedia.
"Ella y el marido llegaron tarde de vender...Ella se puso a preparar la comida para los niños que tenían hambre y él se llevó a los muchachitos a un cuarto que le habían construido unos hermanos de la iglesia, porque la casa de ellos tenía malo el techo", relató.
Tragedia por lluvias
Hasta el momento las autoridades no han dado una explicación sobre lo ocurrido, sino que se han limitado a expresar que el muro cayó por la saturación de los suelos debido a la cantidad de lluvia que cayó en Managua el viernes durante todo el día, sumando al resto de días en que ha llovido en la capital por el ingreso de varias ondas tropicales.
El hecho tuvo lugar el pasado viernes 28 de junio a eso de las 5:30 de la tarde en el barrio Hialeah, cuando el muro de la casa que se ubica arriba del terreno donde se encontraba la humilde vivienda cayó, provocando que los tres niños identificados como Dylan, Jonathan y Abraham de 8, 9 y 12 años junto a su padre Mauricio Arróliga de 49 años quedaran soterrados y murieran instantáneamente.
Los menores eran reconocidos porque pertenecían a una liga de béisbol infantil. El sábado durante la vela sus compañeros de equipo llegaron a despedirse de ellos, e incluso se conoció que ese día tendrían un partido.
Los menores y su papá fueron sepultados en el cementerio Caminos del Cielo, ubicado en el distrito 7 de Managua, y una buena cantidad de personas llegó a acompañar a la familia doliente.
Esta no es la primera vez que ocurren tragedias similares en Nicaragua debido a la ubicación de viviendas en zonas de peligro y por la falta de supervisión en construcciones.
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