La vocera del régimen Rosario Murillo continúa con sus ataques verbales contra sacerdotes de la iglesia católica nicaragüense, esta vez los acusó de ser "agentes políticos" con una "falsa santidad".
Como es costumbre, Murillo hace estos señalamientos en sus alocuciones diarias transmitidas en medios oficialistas, donde se supone hace "anuncios importantes" en relación al "trabajo" de cada ministerio e institución del régimen.
"Hay quienes creen que revestidos de falsa santidad van a seguir engañando, la santidad es cosa seria, y de verdad, qué difícil alcanzarla. Qué difícil, por eso digo falsa santidad, falso amor, falsas prédicas, dizque piadosas, agentes políticos, eso es lo que son", vociferó Murillo.
La vocera mezcló parte de su mensaje por el 17 aniversario del retorno de su marido al poder para decir que los sacerdotes de la iglesia católica se involucraron en política durante las manifestaciones de abril de 2018, además de agentes políticos también los llamó "agentes de perversión".
"...agentes políticos, eso es lo que son y de la peor política, la política que no sirve al bien, que no sirve, que no sirve a la construcción del bienestar, la política que destruye, la política que mata, la política que incendia, la política que saquea, la política que entrega, entreguismo de la Patria, la política perversa, esa no es política, eso, cuando decimos agentes políticos, son agentes de la perversión", dijo la vicemandataria.
En la primer semana del año 2024, Murillo también dejo entrever el odio que siente hacia la Iglesia Católica y habló de "personajes que destilan maldad", una clara referencia a los sacerdotes en el exilio que demandaron información sobre el paradero de sus hermanos en la fe.
El discurso de odio de Murillo coincide con las ocasiones en que el Papa Francisco ha abogado abiertamente por un diálogo diplomático respetuoso en Nicaragua y en el que ha condenado las detenciones arbitrarias de Obispos y sacerdotes del clero, mismos que hasta la fecha se encuentran en calidad de "desaparecidos" ya que se desconoce su paradero y el régimen no ha hecho mención de su estado de salud y donde los tiene.
"Sigue siendo preocupante también la situación de Nicaragua; es una crisis que se prolonga desde hace tiempo con dolorosas consecuencias para toda la sociedad nicaragüense, en particular para la Iglesia", dijo Su Santidad durante su tradicional discurso de año nuevo a las misiones diplomáticas acreditadas en El Vaticano. Nicaragua suspendió sus relaciones con la Santa Sede en marzo de 2023.
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