A través de una pequeña nota de prensa divulgada en todos los medios oficialistas, Daniel Ortega y Rosario Murillo "celebraron" el bautizo de su nieto Camilo Noé Daniel Salas Ortega, hijo de Camila Ortega Murillo.
Sorpresivamente, el bautismo fue llevado a cabo en la Parroquia San Judas Tadeo, en Managua y fue oficiado por el padre Julio Arana, quien ha sido señalado recientemente de estar cercano al régimen Ortega-Murillo. También, concelebró la ceremonia el padre Rafael Ríos de Jinotega.
"Gracias también al padre Julio Arana, párroco de la Iglesia San Judas Tadeo, de la comunidad San Judas, en Managua, y al padre Rafael Ríos, de Jinotega, que nos honraron con el sagrado Sacramento", señala la nota de prensa emitida en horas de la tarde de este pasado 2 de junio.
En las fotografías divulgadas se observa a todos los hijos de la pareja Ortega-Murillo acompañados de sus esposos y esposas, y rodeados de todos sus hijos. Los grandes ausentes en la iglesia San Judas Tadeo fueron Daniel y Rosario.
Esta es la segunda vez que el régimen publica imágenes de los nuevos nietos Ortega. Hace semanas aparecieron ambos chineando al hijo de Camila y al de Juan Carlos Ortega con Xiomara Blandino.
Padre Julio Arana cercano al régimen
El padre Julio Arana, es el vicario judicial de la Arquidiócesis de Managua, en 2018, se pronunció con respecto a la campaña de difamación que simpatizantes sandinistas llevaron a cabo contra Monseñor Silvio Báez, e incluso mostraba apertura a los medios de comunicación para criticar las acciones del régimen de Ortega contra los sacerdotes.
Arana, al mismo tiempo que critica el accionar del régimen, también se congraciaba brindando entrevistas a medios oficialistas donde resaltaba que lo primordial era la paz y el diálogo.
Según el periodista Emiliano Chamorro, el sacerdote tiene vínculos desde hace varios años con el sandinismo, debido a que es el "juez" de la Arquidiócesis, por lo que tiene relación con magistrados del Poder Judicial. Además, hubo rumores que sería uno de los propuestos al Papa Francisco para ocupar uno de los cargos de Obispo que están vacantes.
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Por otro lado, también se conoció que el religioso Rafael Ríos de la Diócesis de Jinotega, forma parte del grupo de sacerdotes "aliados" al régimen. Fuentes cercanas a la Diócesis revelaron que desde 2018 está vinculado con paramilitarismo, e incluso daba nombres de padres opositores y también denunciaba a la población que criticaba a Daniel Ortega.
Incluso, se dice que fue removido del municipio de Yalí por su constante activismo a favor del FSLN. Asimismo, se conoció que sacerdotes y pobladores tuvieron que salir por las represalias y amenazas a las que fueron expuestos por Ríos.
A raíz de 2018, el régimen ha iniciado una arremetida contra la iglesia católica y sus sacerdotes, a quienes ha tildado de "demonios", por lo que el bautizo de uno de sus nietos deja ver la doble moral y el doble discurso que predican.
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