Este 14 de febrero no solo es el día del amor y la amistad, también miles de católicos alrededor del mundo dan inicio al tiempo de Cuaresma y se preparan durante 40 días para la Semana Santa, que este año será en en la última semana de marzo.
En Nicaragua, a pesar del asedio policial y de paramilitares en algunas iglesias, los feligreses acudieron muy de mañana a la Eucaristía para que el sacerdote les impusiera la ceniza en la frente antes de asistir a sus trabajos.
Con la Cuaresma, también dan inicio los viacrucis, que representan el recorrido de Jesús con la cruz hacia el Calvario. Durante el 2023 en Nicaragua estos actos de piedad religiosa fueron prohibidos por el régimen de Daniel Ortega a través de la policía, que no autorizó a los sacerdotes de algunas parroquias a salir a las calles tal y como se acostumbraba.
Se desconoce si este año la medida continúa o al igual que en 2023 algunas iglesias si podrán salir de su perímetro para llevar a cabo los viacrucis aunque sea con custodia policial como ocurrió en 2022.
El año pasado, el Cardenal Leopoldo Brenes orientó a todas las parroquias a tener un plan A y un plan B por si la Policía negaba el permiso de salir a las calles con el viacrucis.
El 2023 no fue un buen año para la Iglesia Católica nicaragüense ya que el régimen Ortega-Murillo arreció la persecución. Más de 30 sacerdotes fueron desterrados hacia Roma y un primer grupo fue enviado a Estados Unidos junto a los 222 presos políticos, además negaron la entrada a religiosos que por diversos motivos habían salido del país.
Órdenes religiosas se vieron obligadas a salir de Nicaragua ya que la Dirección General de Migración y Extranjería no les renovó el permiso de permanencia, entre otros atropellos.
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