El Gobierno de Nicaragua desterró el sábado a Estados Unidos a la doctora Anely Pérez Molina integrante de la opositora Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia y la Unidad Médica Nicaragüense junto a su familia.
Pérez había sido detenida el jueves en horas de la noche y trasladada a la Dirección de Auxilio Judicial «El Chipote». Posteriormente fue acusada por un delito en perjuicio del Estado de Nicaragua y, de acuerdo con varias fuentes, habría sido trasladada a Miami, tal y como informa el diario La Prensa.
La Asociación Médica del Exilio de Nicaragua (AMEN) ha destacado «la importancia» de que Pérez «esté libre», al tiempo que ha manifestado «el rechazo por todas las violaciones a los Derechos Humanos» de la doctora, después «de haber sido arbitrariamente privada de libertad y acusada de delitos que no cometió».
«Bajo ninguna circunstancia esto exime de responsabilidades a las y los involucrados en todo el proceso arbitrario del que ha sido víctima tanto ella como su familia», reza un comunicado, en el que recuerdan que el ejercicio de la medicina no es ningún delito.
Así, AMEN ha demandado «el cese de la represión contra las y los médicos nicaragüenses, así como otros profesionales de la salud quienes han estado sufriendo de amenazas y otros tipos de acosos por no ser afines al partido del Gobierno».
La doctora es también hija del guerrillero sandinista Cristian Pérez, asesinado por la guardia somocista en mayo de 1979.
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