Hospitales de referencia nacional, centros de salud y puestos médicos comunitarios, reportan desde la semana anterior, un aumento en la demanda de atención médica por afectación de los virus de influenza AH1N1 y AH3N2.
Autoridades del Ministerio de Salud, Minsa, han comunicado a personal de centros comunitarios y hospitales departamentales, que se encuentra activa la vigilancia epidemiológica ante los incrementos de casos por ambos virus, sin descuidar la vigilancia sobre el Covid-19.
El sistema de salud de Nicaragua, reportó en 2021 alrededor de 700 casos de influenza y el año pasado, para este mismo periodo, se reportan más de 800 casos.
Vacunas contra la influenza
Más de un millón de dosis de vacuna contra la influenza fueron aplicadas en las jornadas de vacunación en el 2022 y lo que va del año, informaron autoridades sanitarias en medios de comunicación oficialistas. Sin embargo, los casos van en aumento en todo el país, sobre todo con la llegada de las primeras lluvias.
Esta campaña de vacunación contra la influenza es de carácter permanente. Es común observar a personal médico y enfermería del sistema público de salud instalados en puestos móviles en puntos de movimientos ciudadanos como centros comerciales, mercados e incluso de casa en casa.
La red de unidades de salud pública a nivel nacional, cuenta con 75 hospitales, 141 centros de salud y 1,396 puestos de salud.
Médicos alertan
Médicos independientes explican que los malestares que provocan esos virus son muy parecidos entre sí, por lo que es muy difícil establecer una diferencia con los pacientes sospechosos.
“Lo más recomendable es acudir a un puesto médico para las respectivas pruebas especiales y determinar la enfermedad. La influenza presenta síntomas como; fiebre, escalofríos, dolor de garganta, secreción nasal, dolores musculares, dolor de cabeza y fatiga”, dijo un especialista. “El resfriado –amplió– presenta síntomas más leves en relación a la influenza como: secreción nasal, fiebre, dolor de cabeza y en algunos casos tos”.
Los de mayior riesgo
El especialista dijo que las embarazadas, los menores de 59 meses, los ancianos y los pacientes con enfermedades crónicas; cardíacas, pulmonares, renales, metabólicas, del desarrollo neurológico, hepáticas o hematológicas o los inmunodepresión por VIH/sida, quimioterapia, corticoterapia o neoplasias malignas, son los de mayor riesgos de ser atacado por estos virus.
La gripe estacional tiene fácil propagación y se transmite rápidamente en entornos como las escuelas y las casas donde hayan ancianos. Al toser o estornudar, las personas infectadas dispersan en el aire, a distancias de hasta un metro, gotículas infecciosas (con virus), infectando así a las personas cercanas que inspiran esas gotículas. El virus también puede transmitirse por las manos contaminadas.
Para prevenir la transmisión, hay que lavarse las manos frecuentemente y cubrirse la boca y la nariz con un pañuelo al toser. En los climas fríos las epidemias estacionales se producen sobre todo durante el invierno, mientras que en las regiones tropicales, como Nicaragua, pueden aparecer durante todo el año.
Comments