No ha sido el único “endulzante”, trascendió este miércoles que liberó al Vicario de la Catedral Leonardo Guevara a quien esperan ver hoy en la vigilia y mañana sábado, la procesión de la imagen a la que atribuyen varios milagros.
La dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo han querido congraciarse con el pueblo católico de Estelí al declarar oficialmente asueto este sábado, Día de Nuestra Señora del Rosario y dejar en libertad, al padre Leonardo Guevara, a quién secuestró en mayo y lo mantuvo hasta esta semana en una especie de casa por cárcel en las instalaciones de El Seminario.
Guevara estaba a cargo de la Catedral Nuestra Señora de El Rosario de esta ciudad cuando se lo llevaron, con el supuesto argumento que había una investigación en curso por lavado de dinero en la oenegé Cáritas, de la que el sacerdote era director nacional.
Este miércoles trascendió la versión de que el régimen le permitió su salida de El Seminario donde estaba bajo custodia por la investigación, cuyos avances son hasta ahora desconocidos ya que el régimen y su policía manejan estos casos bajo hermetismo, lo que para algunos juristas los hacen caer en la legalidad total. Algunos feligreses de Estelí dicen que “algo han sabido”, pero aseguran que desconocen los detalles y no todos han visto al religioso.
“No sabemos si esto es una buena señal. Esta gente siempre tiene un propósito malo en su mente”, manifestó una feligrés que se congrega en la Catedral de Estelí y para quien ningún sacerdote debería estar preso. “Los han juzgado por delitos políticos y los sacerdotes no hacen política, promueven el reino de Dios, que es justicia y cosas buenas. El primero en ser liberado debería ser el obispo Rolando Álvarez”, agrega el laico.
“Asueto hipócrita”, dicen estelianos
En una contradicción que sólo el régimen entiende, las autoridades locales recibieron la instrucción de establecer como día asueto con derecho a remuneración este sábado, al que desde ahora en adelante será el día de Nuestra Señora del Rosario.
“Se establece como día de asueto remunerado con goce de salario en el municipio de Estelí el día sábado 7 de octubre por ser día principal de la festividad religiosa más importante del lugar según la costumbre”, dice el bando municipal que hace oficial el descanso.
Agrega el mismo bando municipal, que la decisión, tiene como objetivo permitir que la población participe en las festividades religiosas, pero los estelianos se preguntan “¿Cuáles?”, tomando en cuenta que la más importante es la procesión y el mismo régimen las mantiene prohibidas. “A menos que este año lo permitan. Si no es así, sería un asueto hipócrita”, señala un católico para este reporte.
En los últimos días, se han arreciado los ataques a la iglesia Católica sobre todo en las diócesis gobernadas por monseñor Rolando Álvarez, pues el domingo fueron, secuestrados los sacerdotes Iván Centeno de Jalapa y el padre Julio Nororis de San Juan de Río Coco, que pertenecen a la diócesis de Estelí cuyo administrador es el Obispo preso.
“”Nosotros seguimos orando por la iglesia, pero realmente no sabemos cuales son las pretensiones que tiene esta gente. La iglesia no ha anunciado nada nuevo y lo que se ha dicho hasta ahora, es que no habrá procesión”, comentó un feligrés que se declara “confundido” con las acciones de las autoridades orteguistas.
“Esta gente (del régimen) o no están cuerdos o no saben qué hacer con esta su guerra contra la iglesia”, dijo un esteliano que no falla a la procesión de la imagen. “Sea dentro del templo o fuera, estaré porque ellos pueden prohibir la procesión, pero no mi fe católica”, aseguró al solicitar que su declaraciones, sean puestas bajo anonimato por la represión que vive el país.
“El momento de la verdad”, dicen
Ha sido costumbre en Estelí, realizar una vigilia un día previo a la celebración de su patrona la Virgen Nuestra Señora del Rosario y al siguiente día, realizar la misa a la que le sucede la procesión con la imagen que recorre las calles principales de la ciudad.
Con la feroz persecución que ejecuta la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo a los sacerdotes, el encierro de las imágenes y la persecución a la fe, la única certeza de los feligreses es la celebración de la misa solemne. “En pocas horas sabremos la verdad, la vigilia y la procesión son las actividades masivas más importantes, si las prohiben, el asueto y su justificación se va por el caño como se han ido los derechos humanos en este país”, aseguró un religioso.
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