El Hogar de Ancianos “Santa Eduviges” de la Parroquia Santo Tomás Apóstol de Corinto, fue fundado en 1983 en el barrio que antes se llamaba “Base Naval”. Su fundador fue el padre José Schendel, de origen alemán, doña Nubia Osorio, Tere Arana, además de otros ciudadanos caritativos de Corinto.
Las instalaciones del hogar, era la casa de la familia Moriely Icaza, quienes vendieron al sacerdote. El religioso presentó su idea del proyecto social y los corinteños lo aceptaron, vieron necesario un refugio para abuelos y abuelas que no contaban con el apoyo de una familia, muchos de los cuales deambulaban en las calles del municipio y dormían en la intemperie.
Para su manutención doña Teresa Arana, una de las fundadoras organizó kermés para recaudar fondos y seguir apoyando la obra social. Así fue que nació “La Feria Gastronómica del Mar”, la que se ha seguido haciendo después de su fallecimiento para no olvidar su gesto de aprecio al prójimo.
Cada año, los organizadores establecían nuevas metas de recaudación porque las demandas en el asilo cada vez son mayores. Con lo recaudado, se asumían gastos de infraestructura del hogar, alimentación, atención médica, e higiene de los ancianos.
Crueldad con fondos
En el año 2021, la parroquia logró recaudar 573.793 córdobas, en 2022 incrementó a 875.972 con 58 centavos y en el 2023, superó incluso sus mismas expectativas con un récord de recaudación equivalente a 1.099,989 córdobas con 29 centavos. Lamentablemente, el monto fue congelado por el régimen Ortega-Murillo, junto a todas las cuentas de la iglesia Católica nicaragüense.
“Es posible que la iglesia haya cedido la feria a la alcaldía ante las amenazas de afectar ese dinero de los ancianos”, confió un exmiembro del Comité Organizador de la feria que pidió mantener su identidad en el anonimato por temor a las represalias y que dice desconocer si los represores, cedieron el acceso a los fondos de caridad.
Sobre los recaudado en “La Feria Gastronómica del Mar” se sabe que era distribuido de la siguiente forma: un 50% por ciento se entregaba al hogar de ancianos, un 20% para proyecto de la Casa Parroquial, un 10% para Cáritas Parroquial un ministerio que atendía un comedor infantil cerrado por la anulación de la oenegé, otro porcentaje para el Instituto parroquial y el canal católico que funciona en las instalaciones de la Casa Cural. “No sabemos todavía qué pasará con el dinero recaudado que estaba congelado. Estamos esperando”, dijo un trabajador del área administrativa del hogar.
El refugio de adultos mayores de Corinto, requiere de alrededor de 100 mil córdobas al mes para alimentar a 30 ancianos, además del pago de personal y servicios básicos, más asistencia médica para los abuelos que debe ser constante.
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